Noticia remitida por Francisco Molina
Fuente: Cinco Días
MARÍA MATOS ELICES
Las curvas están de moda y las empresas lo saben. El prototipo de cuerpos como el de las hermanas Kardashian o el de Jennifer López y la mujer latina sustituye poco a poco, aunque sea fuera de las pasarelas, al de las mujeres 90-60-90 con Índices de Masa Corporal por debajo de lo saludable. Cibeles, Nueva York o Milán se muestran, de momento, reticentes a incluir estas nuevas tendencias en sus desfiles, pese a los intentos de Candice Huffine o Tara Lynn por reivindicar a la mujer real.
Algunas firmas de moda presentes entre las compras habituales de muchas consumidoras sí que están tratando de llegar a este nicho inexplorado. Hace dos años, Mango lanzó Violeta by Mango, una línea que quería llevar las tendencias más allá de las tallas 36 y 38. Crear prendas que sentaran bien a las mujeres reales: aquellas que no se veían en los desfiles, con unos kilos de más o con las curvas propias de la naturaleza femenina. Sin embargo, la empresa española no empezó con buen pie. Al definir el rango de tallas, fijó el mínimo en la talla 40, una de las más vendidas en los comercios españoles. También se criticó que estas prendas se vendieran en locales distintos a los del resto de su colección.
Nuevos modelos lanzados por Mattel de su muñeca estrella, Barbie.